domingo, 13 de enero de 2013

Siempre en estado de espera.

Vivimos en una sociedad acelerada y complicada. Pero nosotros no somos distintos, en absoluto. Como seres cambiantes nos asusta la idea de atarnos, de aferrarnos a alguien o algo, de adquirir un compromiso. Odiamos afianzar las cosas, acatar normas o cumplir los horarios y planes propuestos, por la sencilla razón de que todo es efímero; las oportunidades vuelan y la vida se escapa, mientras nosotros no queremos correr.
En cuyo caso se trataría de una completa y absurda paradoja, pues como ya he dicho, vivimos agobiados por el tic-tac del reloj, por los plazos...
Es por eso, que de vez en cuando necesitamos parar, respirar y concedernos el lujo de tomar un buen café, de hojear nuestros escritos preferidos, de escuchar aquellas canciones que recuerdan momentos bonitos con personas con las que ya no compartimos nada... 
Lo que es totalmente evidente es que como seres curiosos e inquietos que somos queremos probar cosas nuevas y disfrutar, saborearlas, experimentar con ellas.

Lo que queremos es conocer a otros locos, EMPEZAR DE CERO.

No hay comentarios:

Publicar un comentario